ATIKA

Ubicación: Vitacura. Santiago, Chile.

Selección XIV Bienal de Arquitectura de Chile 2004.

El edificio responde al encargo de una casa comercial en la cual se exhiben y comercializan productos relacionados con baños, cocinas, griferías, granitos, etc.
Este edificio debía también acoger a las oficinas administrativas de los ejecutivos de la empresa.
La orientación del edificio ATIKA se debe básicamente al recorrido del sol y a la luz, la cual penetra dentro de este contenedor.
Esta caja se abre al sur a la manera de una gran vitrina transparente a la Avenida Vitacura, produciendo un retranqueo de las losas sobre la fachada con el propósito de unir los distintos pisos que cuelan la luz sobre muros y cielos.
El acceso se produce a través de un puente, de manera de introducir la luz hacia el piso subterráneo por medio de 2 patios de luz.

El edificio es enteramente blanco tanto en el exterior como en su interior. El blanco actúa como base firme y segura para hacer rebotar la luz, para atraparla, para hacerla reflejar, para permitir bañar en luz los espacios de exhibición y así permitir la exposición de artefactos, cerámicas y griferías. Para aumentar la sensación de abertura espacial las paredes interiores y los antepechos que se abalconan entre pisos son de cristal transparente empotrados en el hormigón.
En el centro del edificio se ubica una escala helicoidal de granito y cristal que une los tres pisos más públicos, cumpliendo un rol protagónico y escultural dentro de la composición y produciendo un equilibro a la manera de un calder.
El tema gravitacional esta resuelto a través de columnas cilíndricas que recorren el edificio a la manera de huesos por donde corre la gravedad ineludible a encontrarse con la tierra. Su sistema sismo resistente lo forman básicamente muros y columnas de hormigón y algunos marcos rígidos que se conectan mediante losas postensadas que constituyen diafragmas rígidos.

Client: Anna Doe